No estoy. No la conozco. No quiero conocerla. Me repugna lo hueco, La afición al misterio, El culto a la ceniza, A cuanto se disgrega.
Jamás he mantenido contacto con lo inerte. Si de algo he renegado es de la indiferencia. No aspiro a transmutarme, Ni me tienta el reposo. Todavía me intrigan el absurdo, la gracia. No estoy para lo inmóvil, Para lo inhabitado.